La bruma es intensa, apenas deduce que hay luz al final, quiere creer, quiere seguir, pero su carga lo entorpece, no piensa con claridad, su dolor ofusca su mente y la llena de amargos pensamientos.
Cada te quiero borrado abre la herida que lo afligió, cada rechazo a su declaración es un sable que lo corta, la sangre fluye a borbotones, sus átomos se descomponen, las arterias apenas lo sostienen, sus latidos caen en picado.
Se apaga en desazón, la sombra lo envuelve, echa de menos la luz con la que ese día brilló, el calor que recibió, la pasión que dedicó, las sonrisas que regaló, aquel tiempo sin reloj, las montañas que conquistó, la amante que lo hirió.
Lucha interminable la del amor por compasión, lucha perdida por una confianza desaparecida, arrogantes zarpazos del orgullo hendido, clara muestra en sus ojos de su Alma descompuesta.
-¡Lucha ahora! ¡Lucha hasta el final! La alegría está cerca, no cedas a la pena, no al apego, no dependas de la que jamás sintió, aquella lección ya paso, el presente ya está aquí, aprendido está lo que debes enseñar, aquello que has de aplicar, nunca más te vencerán, los sentimientos sinceros a ti responderán.
¡Oh invencible serás y a donde quiera llegarás!
La paciencia es mi consorte y con ella navego a través del Mar de la desolación, me apoyo en ella y ella en mí, juntos los dos, juntos sin fin, lo mejor está por venir…
Óscar Gordillo García. ·:·
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